Además tuvimos sencillas consignas que teníamos que cumplir.
El lunes, todos teníamos que llevar algo pintado en la frente.
Hasta el que no pudo venir, envió foto desde casa.
Todos cumplieron ... y menos mal porque el pelele se pasaba por la clase para comprobarlo.
El martes nos tocaba llevar el pelo diferente a como solíamos llevarlo, bien fuera por cambio de color o de peinado. En algunos casos la transformación fue completa. Fue muy divertido.
Y por supuesto, el pelele vino a visitarnos y comprobar si todos habíamos cumplido.
El miércoles nos tocaba ir a todos con algo azul por arriba y de nuevo el pelele vino a vernos, aunque ya imaginaba que todos habíamos cumplido con la última consigna. Ese día nos despedimos de él hasta el próximo curso.
A lo largo de la semana también estuvimos ensayando nuestro baile...
Terminamos un trabajo que estábamos haciendo para llevarnos el día de carnaval: un colgador para la puerta de nuestra habitación.
Y también estuvimos ensayando nuestra poesía:
Y por fin llegó el día de CARNAVAL y aparecimos con nuestras mejores galas.
Después de contar cada uno de qué ibamos disfrazados y hacernos unas fotos hicimos nuestro baile medieval:
A continuación recitamos la poesía aprendida:
Y finalmente como habíamos trabajado tanto, lo celebramos con nuestro BANQUETE MEDIEVAL.
Luego bailamos un montón:
Y salimos a jugar al patio:
Pasamos un día estupendo.
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